En Hoy por hoy del sábado anterior Gustavo Gómez entrevistó al precandidato Alfonso Gómez Méndez para preguntarle si la inscripción de Alfonso López Caballero en la consulta liberal era una jugada para neutralizarle los votos de la casa López que el pudiera tener. En medio de la respuesta el dijo “ladran, luego cabalgamos”. Con esa frase quedó inscrito en una lista cuyo anterior usuario famoso fue Samuel Moreno, quien fue más olímpico, pues dijo que la frase se la dijo el quijote a su fie escudero Sancho. Esto lo hizo acreedor a un divertido editorial en la revista Arcadia y a una columna de Juan Gabriel Vásquez en El Espectador, porque la famosa frase no fue escrita por Cervantes, ni pronunciada por el Quijote, ni mucho menos oída por Sancho, al parecer fue Orson Welles, quien la incluyó en un proyecto de película sobre el Quijote.
Esto es apenas un servicio un servicio social para que no sigamos cabalgando sobre la ignorancia arribista que copia y pega errores como este, para darse un barniz de cultura.
Se queda uno pensando que la frase en boca del doctor Gómez Méndez, es apenas una anécdota al lado de cosas que también se repiten a diario y que a fuerza de ser repetidas pretenden meternos en una realidad paralela o ¿para lelos?: por ejemplo que “la inversión estranjera genera empleo de buena calidá”. Si no, pregúntele al grupo Planeta y al grupo Prisa por los despidos masivos en Casa editorial El Tiempo y Caracol Radio, o que el plebiscito por la reelección de Uuuribe es la voluntad de cinco millones de compatriotas, cuando apenas si pasan de tres millones las costosas firmas recogidas, para no hablar de zonas francas o chuzadas… Ay sagrado corazón.
